República Bolivariana de Venezuela
Maturín. Estado Monagas.
Cada año a nivel mundial se publican libros, revistas y artículos de prensa relacionados con la alimentación, motivados por razones como la preocupación existente en la sociedad por mantener una buena imagen, y por la estrecha relación entre una buena alimentación y la prevención de enfermedades. Sin embargo en la mayoría de los casos se hace únicamente con fines comerciales y económicos. Es por eso que en cualquier lugar donde nos encontremos, a cualquier hora que estemos viendo la TV o conectados a Internet, nos bombardean con la publicidad que se le hace a diferentes tipos de dietas y productos que prometen hacer adelgazar a las personas.
La mayor cantidad de propagandas las reciben las “Dietas Mágicas” o “Dietas Milagro” que son aquellas que según sus creadores garantizan la perdida de mayor cantidad de peso en menor tiempo.
Es tanta la publicidad que llega un momento en que las personas de cualquier sexo y edad, ceden ante la tentación de probar una de estas dietas que, en su mayoría no tienen apoyo científico. Algo que también motiva a la persona a hacer una dieta mágica es la moda que se ha expandido por todo el mundo, a saber, el culto a la belleza física para alcanzar el éxito.
¿Recuerda usted en este momento cuantas dietas ha hecho a lo largo de su vida? ¿Cuántos kilos rebajó? ¿Subió más kilos que los perdidos al dejar la dieta? ¿Sabe usted qué es el efecto yo-yo o rebote? El efecto yo-yo o rebote es la recuperación de la misma o más cantidad de kilos perdidos con gran facilidad por la aplicación de una dieta desequilibrada desde el punto de vista dietético y nutricional. La razón principal por la que se da este efecto es que lo que se pierde es líquido (agua) y masa muscular, en vez de grasa que es lo que realmente se quiere y debe perder, esto debido a la restricción energética o calórica provocada por las “Dietas Mágicas”, ya que se obliga al cuerpo a obtener la energía necesaria de los músculos y de órganos vitales como el hígado provocando una pérdida de peso y volumen a expensas de glucógeno, proteínas, agua y minerales.
Con una dieta mágica la persona no corrige sus malos hábitos alimenticios y al abandonarla vuelve a comer y tomar todo lo que consumía normalmente y el organismo trata de reponer todo el volumen perdido durante la dieta, llenando esos espacios vacíos con grasas provenientes generalmente de un consumo excesivo de alimentos ricos en carbohidratos y otros que contienen un alto índice de grasas saturadas (Nótese “consumo excesivo”).
Ahora quizás usted se pregunte ¿Qué debo hacer para perder peso de manera correcta? Para no sufrir los efectos de las “Dietas Mágicas”, antes de iniciar un tratamiento dietético debe considerar los siguientes factores que contribuirán al éxito en la lucha contra esos kilos demás o en muchos casos obesidad, Médico: que identifique la causa del sobrepeso, Dietético: para modificar los hábitos alimenticios erróneos mediante una educación dietética y Psicológico: para controlar la ansiedad y analizar el comportamiento ante la comida.
Algo importante que se debe incluir en cualquier tratamiento dietético, es la práctica regular de ejercicios físicos ya que estos ayudan a mantener el tono muscular y aumentan el gasto energético. El ejercicio debe adaptarse al estado general de la persona. Busque asesoría en especialistas (Profesores de Educación Física).
Aunque la razón principal por la que las personas se someten a una dieta es reducir la grasa corporal a un nivel que garantice una buena salud, las dietas mágicas están causando estragos a la salud a nivel mundial. Por eso, CUIDADO con las “Dietas Mágicas” y con los productos que ofrecen perder peso sin necesidad de una dieta elaborada por especialistas en la materia, porque son trampas publicitarias que pueden ser muy perjudiciales para la salud de quienes desean perder peso.
La mayor cantidad de propagandas las reciben las “Dietas Mágicas” o “Dietas Milagro” que son aquellas que según sus creadores garantizan la perdida de mayor cantidad de peso en menor tiempo.
Es tanta la publicidad que llega un momento en que las personas de cualquier sexo y edad, ceden ante la tentación de probar una de estas dietas que, en su mayoría no tienen apoyo científico. Algo que también motiva a la persona a hacer una dieta mágica es la moda que se ha expandido por todo el mundo, a saber, el culto a la belleza física para alcanzar el éxito.
¿Recuerda usted en este momento cuantas dietas ha hecho a lo largo de su vida? ¿Cuántos kilos rebajó? ¿Subió más kilos que los perdidos al dejar la dieta? ¿Sabe usted qué es el efecto yo-yo o rebote? El efecto yo-yo o rebote es la recuperación de la misma o más cantidad de kilos perdidos con gran facilidad por la aplicación de una dieta desequilibrada desde el punto de vista dietético y nutricional. La razón principal por la que se da este efecto es que lo que se pierde es líquido (agua) y masa muscular, en vez de grasa que es lo que realmente se quiere y debe perder, esto debido a la restricción energética o calórica provocada por las “Dietas Mágicas”, ya que se obliga al cuerpo a obtener la energía necesaria de los músculos y de órganos vitales como el hígado provocando una pérdida de peso y volumen a expensas de glucógeno, proteínas, agua y minerales.
Con una dieta mágica la persona no corrige sus malos hábitos alimenticios y al abandonarla vuelve a comer y tomar todo lo que consumía normalmente y el organismo trata de reponer todo el volumen perdido durante la dieta, llenando esos espacios vacíos con grasas provenientes generalmente de un consumo excesivo de alimentos ricos en carbohidratos y otros que contienen un alto índice de grasas saturadas (Nótese “consumo excesivo”).
Ahora quizás usted se pregunte ¿Qué debo hacer para perder peso de manera correcta? Para no sufrir los efectos de las “Dietas Mágicas”, antes de iniciar un tratamiento dietético debe considerar los siguientes factores que contribuirán al éxito en la lucha contra esos kilos demás o en muchos casos obesidad, Médico: que identifique la causa del sobrepeso, Dietético: para modificar los hábitos alimenticios erróneos mediante una educación dietética y Psicológico: para controlar la ansiedad y analizar el comportamiento ante la comida.
Algo importante que se debe incluir en cualquier tratamiento dietético, es la práctica regular de ejercicios físicos ya que estos ayudan a mantener el tono muscular y aumentan el gasto energético. El ejercicio debe adaptarse al estado general de la persona. Busque asesoría en especialistas (Profesores de Educación Física).
Aunque la razón principal por la que las personas se someten a una dieta es reducir la grasa corporal a un nivel que garantice una buena salud, las dietas mágicas están causando estragos a la salud a nivel mundial. Por eso, CUIDADO con las “Dietas Mágicas” y con los productos que ofrecen perder peso sin necesidad de una dieta elaborada por especialistas en la materia, porque son trampas publicitarias que pueden ser muy perjudiciales para la salud de quienes desean perder peso.
Alexis Rendón
Profesor de Educación Física
Estudiante de la Maestría "Enseñanza de la Educación Física"
en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador.
